Con un cocktail en el Rara Avis del teatro Solís, fue lanzado ayer el fideicomiso Campiglia Pilay, que propone “ahorrar en ladrillos” y está diseñado sobre la base de un conjunto de ahorristas que persiguen el objetivo común de invertir su dinero en la construcción de inmueble.

El sistema tiene cuotas diferenciales menores mientras no se disfruta del inmueble y permite la comercialización del contrato en cualquier momento, sin penalidades. Existe además un mecanismo de puntajes, que cuál acompaña el proceso de vida de una persona, premiando con puntajes al matrimonio, nacimiento de hijos, el avance en los estudios y la presentación de amigos.

Según el presidente de Pilay Uruguay, Javier Vigo, se basa en tres objetivos fundamentales de la vida: asegurar el futuro de los hijos, ser propietario e invertir con seguridad.

Para el presidente de Campiglia Construcciones, Eduardo Campiglia, esta propuesta abre “de manera innovadora y a la vez responsable, una nueva opción para quienes quieren acceder a una vivienda propia o confían en realizar una inversión, que en ladrillos ha demostrado ser segura y rentable en el tiempo, o a quienes quieren asegurar a sus hijos o a sus nietos un hogar”.

Hoy, en Argentina, se suman al proyecto más de 430 nuevos inversores por mes, generando una inversión proyectada de US$ 446 millones que será volcada a la construcción en los próximos años.

Pilay es una administradora de inversión en activos inmobiliarios. Cuenta en Argentina con más de 150 mil metros cuadrados construidos y una inversión de US$ 100 millones. El sistema Pilay tuvo desarrollo en ciudades como Sante Fé, Rosario, Córdoba y Paraná.